El término de conciliación de la vida laboral y familiar se refiere a que los trabajadores y trabajadoras tengan la posibilidad de compatibilizar su faceta profesional con su vida personal y familiar, de manera que la persona pueda desarrollarse de forma plena en ambos ámbitos.
En el despacho, ante la situación extraordinaria en relación con la pandemia del Covid-19, hemos adoptado una serie de medidas para garantizar la salud y el bienestar de nuestros clientes, empleados y colaboradores, y a la vez garantizar la prestación de nuestros servicios profesionales.
Hemos habilitado a todos los miembros de nuestra organización para que puedan teletrabajar y atender al mismo tiempo a hijos y mayores a su cargo. Por otra parte, hemos decidido reforzar la realización deactividades de forma virtual. Se minimiza así el riesgo de contagio y, en consecuencia, de contraer la enfermedad, al tiempo que se da continuidad a la actividad productiva, de forma que sirva para evitar otro tipo de medidas como la suspensión o el cierre de la empresa. Esto enlaza con el artículo que publicamos sobre la cultura y los valores, que el despacho traslada a los sus trabajadores, como elemento claves para reforzar la cultura de empresa. Son los líderes que fomentan la situación con su propio ejemplo, reorientando la cultura del presencialismo hacia otra enfocada en generar valor. En tal caso, corresponde a la empresa establecer los medios necesarios para poder realizar dicha actividad a distancia.
Con el teletrabajo la organización del trabajo responde tanto a una innovación tecnológica como a una flexibilidad organizativa en un entorno cambiante.
La digitalización del despacho y los servicios online que prestamos desde hace años van a ayudar sin duda ante las actuales necesidades y nuestros profesionales cuentan con todos los medios para prestar los servicios desde sus domicilios de igual modo a como lo harían desde la oficina. Hemos reforzado todos nuestros canales de comunicación no presenciales: teléfono, email, MyCim o página web, para mantener la prestación del servicio de manera no presencial para todos aquellos clientes y colaboradores que lo precisen.
Hemos aumentado la flexibilidad. Somos conscientes de que la tarea de cuidar a un familiar no siempre se puede ejercer en un horario rígido, con reuniones y entregas inamovibles, de tal forma que potenciamos los encuentros virtuales a través de teleconferencias y multiconferencias, implantando una comunicación interna fluida más fácil para conocer las necesidades y limitaciones de poder adaptar el ritmo del trabajo sin perder horas de productividad.
El escenario al que nos enfrentamos es cambiante por naturaleza, y va a exigir adoptar en cada momento las medidas necesarias para garantizar la seguridad de nuestros profesionales y clientes, con la voluntad de poder mantener la prestación de nuestros servicios profesionales con los estándares de calidad que nos exigimos. En atención a las indicaciones que establezcan las autoridades sanitarias adaptaremos las medidas más eficaces en cada momento.
La conciliación laboral y familiar es esencial para que los trabajadores, el pilar de cualquier empresa, estén motivados y sean eficientes.
