No todos los inversores se llevan bien con el riesgo. De hecho algunos tratan de evitarlo lo máximo posible. Hasta hace apenas una década, para conseguirlo, se tenían que resguardar en productos muy básicos. Hablamos de los ofrecidos por entidades financieras y que, pese a garantizar el dinero invertido, apenas ofrecían rentabilidad.
Estos eran los depósitos y las imposiciones a plazo fijo, que obligaban a apalancar durante largos periodos de tiempo las inversiones, incluso con penalizaciones si queríamos retirarlo antes de tiempo. Ahora por suerte la situación ha cambiado considerablemente, y el abanico de posibilidades que se tiene como pequeño inversor es prácticamente infinito. Y, por cierto, mucho más sencillo de gestionar gracias a la aparición de las plataformas digitales como 1000Extra bróker online.
Como traders adversos al riesgo tenemos dos opciones muy interesantes y sencillas: por un lado las letras y bonos del Tesoro.
Este producto tiene como garante al estado, con lo que el retorno de la inversión está garantizado –que quiebre un país es muy difícil, por no decir imposible- y ofrece muy buenas rentabilidades. Además se dispone de opciones a corto, medio y largo plazo.
Además de estas letras, otra opción si no queremos arriesgar en demasía es comprar acciones de empresas consolidadas, cuya consistencia y futuro no estén comprometidos. Estas compañías suelen conceder de manera anual muy buenos dividendos, de hasta el seis por ciento. Eso las hace muy atractivas de cara a inversores conservadores que prefieren vivir tranquilos y eludir las fluctuaciones que, por naturaleza, tienen los mercados secundarios.
Órdenes de stop & loss
Pero las letras del tesoro y comprar acciones por dividendo no son las únicas vías para sacar rendimiento a nuestro dinero sin comprometer nuestros saldos. En el mercado bursátil las distintas plataformas financieras nos ofrecen una herramienta muy atractiva, que nos ayudará a la hora de invertir incluso en el corto plazo.
Es la orden de stop & loss. Esta orden de compra, que diríamos que es de obligada utilización para mitigar riesgos, permite en el momento de ejecutarla marcar un precio al que, de manera automática, se venda el valor.
¿Qué supone a efectos prácticos? Que en el momento de compra ya sabemos cuál va a ser nuestra máxima pérdida esperada. Este dato nos permite jugar con las rentabilidades y sabiendo desde el primer momento qué podemos perder como mucho.
La orden de stop & loss además tiene una ventaja: es dinámica, de tal manera que puede modificarse de manera automática a medida que el precio del valor vaya subiendo. Esto ayudaen fases alcistas a asegurar nuestra posición y, en caso de cambio de tendencia, salir con garantías y ganar dinero.
Sin duda, una de las herramientas más interesantes que podemos encontrarnos en la actualidad.
Los simuladores
Otra herramienta para minimizar los riesgos son los simuladores, que nos permiten operar en cualquier mercado financiero pero con la tranquilidad de hacerlo con dinero ficticio. Así vamos a poder aprender la idiosincrasia de cada producto, sin poner en juego nuestros ahorros.
