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Absuelto de este cargo un pedófilo que manipuló su documentación para entrar a trabajar en un colegio y continuar su actividad delictiva

Una reciente sentencia del Tribunal Supremo(TS) ha confirmado las penas impuestas a un acusadopor los delitos de elaboración de pornografía infantil con reincidencia, atentado contra la integridad moral, y descubrimiento y revelación de secretos.

Se trata de un hombre que tras cumplir condena en otro Estado europeo por delito de pornografía infantil se desplazó a España para trabajar como cuidador de niños particular y profesor (particular y en centros escolares).

Los empleos que obtuvo le sirvieron para realizar fotografías y vídeos de los menores en los que aparecían desnudos, y accedió sin autorización a imágenes y grabaciones personales almacenadas en los PCs de alguna de las familias para las que trabajó. En el colegio, aprovechó estar solo en clase con los menores, para grabar vídeos y tomar fotografías de estos, captando zonas íntimas de ellos y modificándolas para darles mayores connotaciones sexuales.

Para poder trabajar como profesor auxiliar nativo de inglés en el colegio, y con el fin de ocultar sus antecedentes penales, el acusado aportó copias del pasaporte, del título oficial de la universidad y del certificado de docente titulado, que resultaron ser reproducciones falsas.

Para el TS, aunque el acusado, consciente de sus antecedentes penales, que le impedirían obtener un empleo de estas características, confeccionó unas fotocopias de su pasaporte, del título universitario y de la certificación de docente titulado, alterando en ellas datos en relación con los documentos originales (fotocopias que no habían sido autenticadas), no tenía en este caso ánimo de perjudicar a un tercero, como exige el Código Penal para castigar como delito esta conducta y, en consecuencia le absuelve.

En todo caso, esta determinación no afecta al resto de condenas, por las que deberá cumplir hasta 7 años de prisión por el delito de pornografía infantil, 7 años por cada uno de los tres delitos de elaboración de pornografía infantil por los que resulta condenado, 2,5 años por revelación de secretos, y otras penas accesorias.

Nuestros profesionales están a su disposición para defender su causa y conseguir la ajustada calificación penal de los hechos

Fuente: Adec Assessors

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