En las últimas semanas, la Comisión Europea ha dado el visto bueno a la concesión de ayudas vinculadas al vehículo eléctrico y conectado (PERTE VEC), y el Consejo de Ministros ha aprobado el “PERTE para la salud de vanguardia” y el de energías renovables, hidrógeno renovable y almacenamiento (PERTE ERHA).
Concebidos como proyectos de carácter estratégico con gran capacidad de arrastre para el crecimiento económico, el empleo y la competitividad de la economía española, además de con un alto componente de colaboración público-privada y de transversalidad a las diferentes Administraciones públicas concernidas, los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) fueron creados por el RD-Ley 36/2020, de 30 de diciembre, por el que se aprueban medidas urgentes para la modernización de las Administración Pública y para la ejecución del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Su puesta en marcha, no obstante, se hizo esperar, no siendo hasta el 13 de julio de este año cuando el Consejo de Ministros aprobó el primer PERTE, dedicado al desarrollo del vehículo eléctrico y conectado (PERTE VEC), con el objetivo de crear en España el ecosistema necesario para el desarrollo y fabricación de vehículos eléctricos y conectados a la red y convertir a nuestro país en el hub europeo de electromovilidad. El desarrollo de este proyecto contempla una inversión total de más de 24.000 millones de euros en el periodo 2021-2023, con una contribución del sector público de 4.300 millones de euros y una inversión privada de 19.700 millones de euros.
En las últimas semanas, sin embargo, hemos asistido a una aceleración de actuaciones públicas que dan buena muestra de que los PERTE empiezan a ser una realidad, configurándose como el instrumento cualitativo y cuantitativo más importante en la ejecución de nuestro Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
En primer lugar, la Comisión Europea ha aprobado recientemente un marco de ayudas de Estado específico vinculado al PERTE VEC por un valor de 3.000 millones de euros. Concretamente, con fecha 9 de diciembre, la Comisión dio el visto bueno a la concesión de ayudas vinculadas a la Línea transformadora de la industria (“Actuaciones integrales de la cadena industrial del VEC”) que, con una dotación de 2.975 millones de euros, constituye una de las actuaciones de mayor calado incluidas en dicho PERTE.
Asimismo, en el Consejo de Ministros celebrado el 30 de noviembre fue aprobado un segundo Proyecto Estratégico denominado “PERTE para la salud de vanguardia”, con el que se pretende mejorar la salud de la población a partir de la innovación diagnóstica, terapéutica y preventiva en el Sistema Nacional de Salud, que, a su vez, permitirá fomentar la generación de tejido industrial y la creación de empleo de calidad. En total, se prevé una inversión del sector público y privado de 1.469 millones de euros durante el periodo 2021-2023, de los que 982 millones proceden de fondos públicos.
Finalmente, en el Consejo de Ministros del pasado 14 de diciembre, fue aprobado un tercer PERTE, esta vez sobre energías renovables, hidrógeno renovable y almacenamiento (PERTE ERHA), mediante el que se pretenden reforzar las áreas asociadas a la transición energética en la que España está bien posicionada, como las energías renovables, la electrónica de potencia, el almacenamiento o el hidrógeno renovable, e impulsar aquellas de menor presencia, con el objetivo último de reducir la dependencia energética exterior y apostar por fijar las bases que permitan lograr una transición energética “designed & made in Spain”. Se estima que su puesta en marcha movilizará una inversión superior a 16.300 millones de euros, de los que el sector público aportará 6.920 millones, a través de una serie de líneas que se prevé estén ya disponibles durante los años 2022 y 2023.
