Recientemente y coincidiendo con año de pandemia, en el que precisamente se ha producido un número de fallecimientos muy superior al habitual con una cifra oficial de 20.000 defunciones en toda Cataluña, ha entrado en vigor una nueva ley que modifica el incremento de sucesiones, con efectos del 1 de mayo de 2020, mediante la cual, se han incrementado considerablemente las cantidades a satisfacer en concepto de dicho impuesto.
La Generalitat ha aprovechado la situación y en aplicación de esta nueva norma, ha procedido a aplicar sobre las cada vez más numerosas herencias, los incrementos positivos derivados de la misma, que van aumentado desmesuradamente, en función de la base. Esta actuación perjudica a los herederos y resto de beneficiarios de la herencia, hasta tal punto que muchos optan por renunciar a la herencia, al no poder hacer frente a las cargas económicas derivadas de este impuesto.
Ante esta situación, a efectos de evitar los perjuicios económicos de este impuesto, existe la alternativa de empadronarse en otra comunidad en el que el impuesto no sea tan gravoso, o bien, recurrir a la práctica de donaciones en vida, aunque esta última alternativa tampoco es tan beneficiosa, ya que las donaciones deberán imputarse a la herencia y aumentarán la base de la misma por lo que también aumentará el tipo impositivo aplicable, y en consecuencia, la cantidad a pagar será superior.
Para más información sobre el incremento en el impuesto de sucesiones en Cataluña, os dejamos el siguiente enlace: impuesto sucesiones Cataluña.
