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En España se producen una media de más de 300 divorcios al día. De entre ellos, uno de cada diez presenta una alta conflictividad en su gestión derivada del incumplimiento de la normativa por parte de uno de los cónyuges – las más comunes tienen relación con el no cumplimiento de la custodia fijada o del régimen de visitas de los hijos en común-.

De este modo, la Fundación Filia de Amparo al Menor y el Centro de Mediación en Derecho Privado, adscrito a la Conselleria de Justicia de la Generalitat catalana, acaba de poner en marcha en Cataluña una prueba piloto de la figura del “coordinador parental”. La creación de esta figura se debe a la consideración de que existen actualmente ciertas carencias en las herramientas para combatir este tipo de situaciones.

De momento se trata de una prueba piloto, por lo que únicamente se hará uso de la figura del coordinador parental en casos en los que la conflictividad sea alta.

La coordinación y la supervisión de esta figura serán a cargo de los jueces. Y su elección estará en manos de los mediadores familiares.

La funcionalidad que cumplirá el coordinador parental será básicamente de apoyo y asistencia a los progenitores para implementar su plan de parentalidad, resolución de diferencias entre ellos y orientación en relación a las necesidades derivadas de los hijos en común. Es decir, trabajarán en paralelo a la ejecución de la sentencia. Además, tendrá la capacidad de tomar decisiones referentes a cuestiones que modifiquen temporalmente la vida cotidiana –como el régimen de transporte de los menores, régimen de visitas o equipamientos-.

La visión a largo plazo de la figura del coordinador parental, es poder incorporarla en todos los procesos de divorcio con niños a nivel nacional. Estaremos atentos para ver cómo se desarrolla.