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En el mes de enero de 2024, la Asociación Española de Normalización (en adelante, UNE) emitió un informe titulado Apoyo de las normas para el reporte ESG, con el objetivo de impulsar la aplicación de normas concretas por parte de las organizaciones españolas en su labor de presentación de información sobre sostenibilidad.

La presente nota tiene como propósito ofrecer una aproximación a todo lo concerniente al reporte de información por parte de las corporaciones, centrándose especialmente en los beneficios inherentes a este proceso y los principales aspectos regulados en los diversos ámbitos de reporte.

De acuerdo con las directrices establecidas por la UNE, expresadas en el mencionado informe, se busca promover el uso de las normas UNE, EN, ISO y IEC (en adelante, las normas) por parte de las organizaciones en España. Esta iniciativa tiene como fin principal asegurar el cumplimiento de las disposiciones establecidas en la Directiva (UE) 2022/2464 de Información de Sostenibilidad Corporativa (en adelante, CSRD).

La CSRD establece obligaciones de reporte en el ámbito de la sostenibilidad, abordando tres (3) dimensiones específicas: ambiental, social y buen gobierno, conocidas como ESG por sus siglas en la terminología en inglés (en adelante, ESG). Estas obligaciones tienen como finalidad principal dar cumplimiento al Pacto Verde Europeo, iniciativa activada por la Comisión Europea en el año 2019, con el objetivo de impulsar un mercado europeo sostenible.

El presente contexto de reporte se fundamenta en las disposiciones contempladas en los European Sustainability Reporting Standards, los cuales intensifican las exigencias del marco regulatorio europeo en conjunción con la restante normativa de la Unión Europea.

Aunque resulta evidente que las organizaciones españolas deberán dedicar recursos y esfuerzos significativos para alinear sus operaciones a las normas establecidas y cumplir con los criterios mínimos correspondientes, la observancia de las obligaciones legislativas contribuye a la generación de competitividad por los siguientes motivos:

  • Facilita la eficiente utilización y optimización de los recursos, esfuerzos y procedimientos que las entidades destinan al cumplimiento de la normativa vigente.
  • Proporciona una amplia gama de normas en el ámbito de la sostenibilidad que se erigen como una fuente fiable, sólida y reconocida, tanto cualitativa como cuantitativamente.
  • La normalización se fundamenta en el consenso y la transparencia, asegurando así la efectividad en la implementación de normativas, no solo a nivel europeo, sino también en los ámbitos estatal, autonómico y local, destacando su pertinencia en el ámbito de la contratación pública.
  • Constituye una herramienta facilitadora en el proceso de verificación de la información de sostenibilidad, simplificando la labor de los auditores y verificadores, al mismo tiempo que proporciona a los inversores y partes interesadas una visión integral de su desempeño financiero, social y ambiental, así como de la gestión de riesgos y el cumplimiento normativo.

En lo que respecta a las normas que regulan los ámbitos definidos por los criterios ESG, se destacan aquellas que versan sobre las siguientes materias:

  • En el ámbito ambiental, cobran relevancia las normas que cuantifican las emisiones de gases de efecto invernadero y fomentan la economía circular, facilitando su medición dentro de la organización. Estas normativas están contempladas en la UNE-EN ISO 14064-1 de gases de efecto invernadero (inventario) y la ISO 59020 de medición y evaluación de la circularidad, respectivamente.
  • En cuanto a la dimensión social, se dispone de normativa orientada a asegurar un entorno laboral estable, como lo establece la norma UNE 19604 de sistemas de gestión de Compliance socio laboral; así como normas que garantizan la inclusión, siendo la normativa ISO 30410 de diversidad e inclusión, un respaldo en esta materia.
  • Las normas vinculadas al buen gobierno ofrecen a las organizaciones herramientas específicas para abordar la gestión del cumplimiento normativo en áreas de relevancia penal, mediante la norma UNE 19601 de sistemas de gestión de Compliance penal, así como tributaria, con el respaldo de la UNE 19602 de sistemas de gestión de Compliance tributario. Además, estas normas facilitan la gestión eficaz del riesgo, conforme a las disposiciones contenidas en la UNE-ISO 31000 de Gestión del riesgo, entre otras regulaciones pertinentes.

Después de este análisis, es necesario destacar la relevancia del Compliance en el proceso de normalización y presentación de informes relativos a la sostenibilidad corporativa. El Compliance, como herramienta facilitadora de la gestión empresarial responsable, emerge como garante de la transparencia, así como de la gestión y mitigación de riesgos, anticipándose a desafíos futuros en el ámbito de la sostenibilidad.

En este contexto, la integración efectiva de las obligaciones normativas en materia de sostenibilidad y el Compliance asegura que la organización se ajuste a los estándares legales y éticos aplicables.

A modo de conclusión, la utilización de las normas por parte de las organizaciones españolas y el cumplimiento normativo se entrelazan en la búsqueda de una gestión empresarial sostenible y ética. La implementación efectiva de ambas prácticas no solo contribuye al éxito a largo plazo de la organización, sino que también fomenta la confianza de inversores, clientes y otras partes interesadas en la entidad.

Departamento de Compliance de Molins Defensa Penal.

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