Una de las mayores dificultades a la que enfrentan las pequeñas y medianas empresas es la de defender sus precios en el mercado. Los factores que comúnmente afectan más la estabilidad de los precios son:
Estos afectan con mayor fuerza a los pequeños negocios, que generalmente se ven forzados a transformar sus precios para mantenerse a flote en las marejadas del mercado. A pesar de su fragilidad, los pequeños comerciantes pueden tomar algunas medidas para estabilizar sus precios, aquí te van unos consejos para conseguirlo.
La clave para mantener los precios estables es definirlos correctamente desde el principio. Es frecuente que los emprendedores piensen que poniendo precios bajos venderán más, por lo que muchos subestiman el precio de sus productos o comienzan a bajarlos cuando no se alcanzan las ventas esperadas. Para fijar un precio correcto debes centrarte en el valor y pensar desde el principio a largo plazo.
Los especialistas en mercadotecnia afirman que la clave de las ventas está en no pensar en el precio, sino en mostrar el valor de tu producto. De acuerdo con esta idea, el precio de un producto debe establecerse pensando, por un lado, en el coste real de producción, es decir, aquel que contempla los costes fijos y variables. Y por otro, en el valor del producto, que se establecerá integrando el valor intrínseco, es decir las necesidades que resuelve y qué es lo que lo diferencia de los productos de la competencia y el valor extrínseco, esa capa externa, la “cara” que da tu producto al mundo.
Otro error frecuente es pensar únicamente en la rentabilidad a corto plazo, derivada por la preocupación de recuperar lo antes posible la inversión. Esta preocupación es genuina, por lo no puedes utilizarla como estrategia de marketing.Si decides comenzar estableciendo precios bajos especifica que se trata de un ‘precio de lanzamiento’ y establece siempre los límites de las promociones.
Una vez establecido el precio, debes preocuparte por mantenerlo estable, para lo que existen diversas estrategias:
Utiliza siempre estas estrategias antes de comenzar a bajar los precios de tu producto, ya que esto podría provocar que el cliente perciba tu producto como uno de poco valor, por lo que tendrá menos interés en comprarlo,
te veas obligado a disminuir la calidad en el futuro,la disminución de la calidad terminará aumentando tus costes, ya que tus ventas y tus márgenes bajarán.
Es mucho más barato mantener a un cliente que ganar uno nuevo, así que la mejor forma de establecer precios es convencer al mercado del valor de tu producto y pensar a largo plazo, para asegurarte de que podrás mantener la calidad.
