La cuota de la Seguridad Social de autónomos ha subido este año 2019 tras la puesta en marcha del Real Decreto este pasado 1 de enero. Cada año, el Gobierno tiene la posibilidad de congelar la subida o aplicar incrementos, como ha ocurrido en este último caso.
Esta cuota se paga de forma mensual y es obligatoria para todos los trabajadores autónomos. El pago a la Tesorería General de la Seguridad Social puede hacerse de forma presencial en la misma, a través de su página web o domiciliando el mismo en nuestra cuenta bancaria, la opción más cómoda.
La cuota de la Seguridad Social para autónomos dependerá de la base de cotización. Esta base cuenta con un mínimo y un máximo que podemos elegir. Según lo que decidamos pagar tendremos unas prestaciones determinadas en caso de desempleo, enfermedad, accidente o tras la jubilación.
Actualmente, la base mínima de cotización es de 944,40€ al mes mientras que la base máxima es de 4.070,10€ mensuales. Si estás en la base mínima, al tener haber aumentado un de un 29,80% a un 30%, la cuota será de 283,30 euros.
En caso de estar en la base máxima, la cuota de la Seguridad Social de autónomos será de 1.221,03 euros. Para casos medios, habrá que calcular un 30% dependiendo de lo que estemos pagando.
Si pagamos los 283,30€ estaremos cubiertos en caso de enfermedad común, accidente, enfermedad laboral, formación o cese de actividad.
Aun así, hay que tener en cuenta que el Gobierno también ha aprobado un aumento de la tarifa plana para autónomos que inicien su actividad. Actualmente, dichos autónomos contarán con una tarifa mensual de 50€ durante el primer año.
Además, también las comunidades autónomas quieren ofrecer facilidades para aquellos emprendedores que optan por comenzar como autónomos. En la Comunidad de Madrid, esta tarifa plana de 50€ se prorroga durante un año más, por lo que se podría estar dos años completos pagando 50€ antes de pasar a la cuota de 283,30€.
Hay que tener en cuenta que la cuota de la Seguridad Social para autónomos se paga por meses completos. Por ello, si comenzamos a trabajar un día 15 o un 20, tendremos que pagar igualmente el mes completo.
Tras la nueva subida de la cuota, podremos cobrar la prestación por desempleo tras el cese de actividad. En este caso tendremos una base reguladora del 70% sobre nuestra base de cotización. Es decir, que si tenemos la base mínima nos quedará un paro de 661,04€/mes.
Eso sí, en caso de que seamos trabajadores con hijos a cargo, la prestación puede ser superior, situándose entre el 80% y el 107%, dependiendo de nuestro caso.
En cuanto al tiempo que necesitamos cotizar para tener derecho a paro el mínimo será de un año, lo que nos dará derecho a cuatro meses de prestación al igual que si fuéramos trabajadores asalariados.
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